Dirección: Park Chan-wook.
País: Corea del Sur.Año: 2003.Duración: 120 min.Género: Thriller.Interpretación: Choi Min-sik (Oh Dae-su), Woo Ji-tae (Lee Woo-jin), Gang Hye-jung (Mido), Chi Dae-han (No Joo-hwan), Oh Dal-su (Park Cheol-woong), Kim Byoung-ok (Sr. Han), Lee Seung-shin (Yoo Hyung-ja), Yoon Jin-seo (Lee Soo-ah), Lee Dae-yun (Mendigo), Oh Gwang-rok (Suicida).Guión: Hwang Jo-yung, Lim Joon-hyung y Park Chan-wook; basado en una historia original de Tsuchiya Garon y Minegishi Nobuaki.Producción: Kim Dong-joo.Música: Cho Young-wuk.
Fotografía: Jung Jung-hoon.Montaje: Kim Sang-bum.Diseño de producción: Yoo Seong-hee.Vestuario: Cho Sang-kyung.
Estreno en Corea del Sur: 21 Nov. 2003.
Estreno en España: 28 Enero 2005.
La historia gira en torno de su protagonista Oh Dae-su, un hombre que fue secuestrado delante de su casa y que, sabemos tiene, una hija, una esposa y una vida lo más normal que se puede pensar. Sin saber dónde está encerrado, ni porqué está secuestrado, ni cómo salir de ese calvario, percibe en la televisión que tiene en su habitación la terrible noticia de que su mujer fue asesinada brutalmente. La explicación de la policía: el principal sospechoso es Dae-su pues encontraron su sangre en el lugar del hecho. El encierro perpetuo lo lleva a hacer ejercicio como un modo de matar el aburrimiento pero también como la manera de prepararse para lo que se convirtió en el único objetivo que le da sentido a su vida: la venganza hacia la persona que le hizo esto. Un día, luego de desmayarse con el gas que lo adormecía cotidianamente, despierta en una terraza con otra ropa, dinero, un teléfono y un hombre a punto de suicidarse a quien decide salvar para contarle la terrible historia de su vida en estos últimos 15 años de calvario y penumbra. Ésta es, en realidad, la secuencia inicial de la película que genera, ni más ni menos, una inmensa intriga por saber qué demonios le pasó a este hombre, quién fue el artífice de esta situación y porqué alguien merecería algo semejante. Y, de ese modo, uno no puede dejar de ver la película y de admirar lo magistralmente filmada que está, donde la atracción por las imágenes es mucho más fuerte que lo suculenta de las escenas. Y lo advierto: es una película muy violenta pero muy fascinante al mismo tiempo. Entonces ¿somos los seres humanos violentos por naturaleza? ¿O la violencia sólo surge como repuesta a una situación que amerita su ejercicio? La reflexión que yo fui haciendo también giró sobre la venganza pues Dae-su encuentra la aplicación de la venganza como el único móvil posible que dará sentido a su desdichada existencia. ¿Somos los únicos seres que nos vengamos? ¿Puede la venganza convertirse en el propósito de la vida humana? El director coreano brinda su respuesta a través de este filme maravilloso, escandalosamente atractivo, espectacularmente filmado y muy bien interpretado. Pensar en lo humano también tiene la arista de la brutalidad del hombre y la violencia también es motivo de reflexión filosófica. Muy recomendable, aunque vayan sabiendo que verán sangre y violencia.